Trabajar en BLOCK en clave de igualdad

Micaela, Nahir y Sahira llevan tres años en medio de bobinas, rotores, grúas y sampis. Cada una con su propio estilo o con tareas diferentes pero unidas por un denominador común: apropiarse de cada motor eléctrico que llega a sus manos y transformar cada problema en una solución, a la par de sus compañeros.

Nahir se sube al sampi para llevar el motor de un buque pesquero hasta el camión que lo trasladará a Mar del Plata. A pocos metros, Micaela “despega” minuciosamente decenas y decenas de las láminas de un rotor que espera turno para su reparación. En la planta alta, Sahira prepara las cintas aislantes que serán necesarias para el próximo bobinado. Es viernes pero puede podría ser cualquier otro día en Electrotécnica BLOCK, la empresa que las eligió pero que ellas eligieron como espacio laboral.

De ese modo y desde hace casi tres años se dio y se dieron la oportunidad de desembarcar en un mundo poblado de hombres, convirtiéndose en las primeras operarias mujeres en habitar nuestros talleres.

En poco tiempo se convirtieron en parte de nuestro staff mecánico. Mica y Nahir inicialmente; y Sahira poco después siguiendo los pasos de su papá, que también viste la camiseta de BLOCK.

Cada una le imprime su propio estilo a la jornada. Observadoras, creativas, detallistas, ocurrentes, metódicas, aplicadas, pacientes, persistentes. Sin embargo, hay algo que las une y las identifica: siempre están dispuestas a apropiarse de cada motor eléctrico que llega a sus manos con el objetivo de transformar cada problema en una solución.

Trabajan a la par de sus compañeros varones y son parte del proceso de fabricación, diseño, mantenimiento y bobinado de motores eléctricos dentro BLOCK sin dificultades.

Hacen “trabajo de hombres” con idénticos resultados, dispuestas a ir por más y abrirse paso en igualdad de condiciones.

Tienen a su alrededor motores que pesan toneladas y cuya función impacta en la vida de millones de personas. Por sus manos, pasan piezas o bobinas de trenes, molinos eólicos, generadores eléctricos y molinos cementeros. Hacen aislación, manejan planchuelas de cobre, encintan bobinas, preparan campos y se mueven con total destreza.

Aprendieron a hablar el mismo idioma que sus compañeros y palabras como estator, rotor, carcasa, ejes y campos les resultan tan familiares como corriente continua, voltios y amperios.

No saben de límites, prejuicios ni imposibles. Tienen aspiraciones, expectativas y nuevos sueños por cumplir. Aplican su propia receta en cada paso que dan y consideran que el principal ingrediente es trabajar a la par y junto con cada uno de sus pares. Se sienten respetadas desde la empresa y entre compañeros.

En este 8M, Día Internacional de la Mujer, sintetizamos en ellas tres nuestro homenaje a todas y cada una de las mujeres que directa o indirectamente forman parte del enorme engranaje de Electrotécnica BLOCK.